A la hora de hacer una inversión inmobiliaria, son muchos los que tienen dudas sobre la cantidad de capital que necesitan para dar este paso. Pero, en contra de lo que muchas personas creen, no es necesario disponer de un alto grado de liquidez para invertir en inmuebles, ya que se puede recurrir a fuentes de financiación externas. Para ello, una de las opciones más recurrentes y recomendables es pedir una hipoteca para comprar una vivienda como inversión.
Como ya hemos comentado en este blog, utilizar la hipoteca en una inversión también puede servir para aumentar la rentabilidad. Esto se consigue con el apalancamiento de la hipoteca. Una operación que ofrece ventajas como el acceso a más propiedades o un menor riesgo. Si quieres saber más sobre el tema, te damos todas las claves en este artículo.
Pero, centrándonos en el proceso de pedir una hipoteca para una vivienda como inversión, debemos saber que hay varias alternativas. La opción más habitual es pedir una segunda hipoteca. De esta forma, simplemente, se tendrían dos hipotecas independientes y se pagarían dos cuotas.
Aparte de solicitar un segundo préstamo hipotecario, también se puede rehipotecar el inmueble que ya se tiene o ampliar la hipoteca de este. Para el primer caso, se cancelaría la hipoteca actual y se firmaría otra adaptada a las nuevas condiciones. En el segundo supuesto, se realizaría una novación sobre la hipoteca y se ampliaría el dinero que el banco presta.
¿Qué tener en cuenta a la hora de pedir una hipoteca para una vivienda como inversión?
Por lo general, a la hora de comprar una vivienda como inversión, es conveniente no pasar por alto algunos pasos. Por ejemplo, evaluar las diferentes opciones disponibles y hacer un pequeño estudio al respecto, analizar el mercado del alquiler en la zona en la que se encuentra el inmueble, así como la inversión de capital necesaria y la rentabilidad esperada.
En este sentido, la compra de un piso con inquilino ofrece interesantes ventajas, ya que reduce mucho el riesgo. Si quieres saber por qué comprar una vivienda con el inquilino es una buena inversión, no te pierdas este artículo.
En cualquier caso, tal y como señalan desde Bankinter, existen algunos requisitos más estrictos cuando se trata de pedir una hipoteca para una vivienda como inversión, o para una segunda vivienda en general:
- Es necesario tener algo más de ahorro que para una primera hipoteca. En estos casos, la cantidad concedida por el banco suele ser algo más limitada. Generalmente, en torno al 60 % y el 75 % del valor de tasación.
- Se requiere un mayor nivel de ingresos. Este punto es conveniente ya que, habitualmente, los plazos que se dan en este tipo de préstamos hipotecarios son menores. Por lo general, no sobrepasan los 25 años. Además, los intereses suelen ser más altos. Evidentemente, esto depende tanto del banco como de la hipoteca. Pero, aún así, es frecuente que tengan una carga más alta en lo referido a los intereses.
- Dar otras garantías adicionales. Para conceder este tipo de hipotecas, se suelen requerir avales. Para ello, una vivienda habitual solo podría servir de aval si está libre de cargas.
Es el momento perfecto para invertir en una segunda vivienda, solo tienes que planificar tu inversión
El mayor nivel de exigencia, en términos generales, responde al hecho de que para las entidades financieras es un producto que entraña un mayor riesgo. Esto se debe a que la primera vivienda, al ser la residencia habitual, es la de preferencia para el comprador. Por lo tanto, ante una posible falta de liquidez, la segunda hipoteca sería la primera damnificada.
Sea como sea, una buena planificación del inversor a la hora de pedir una hipoteca para una vivienda como inversión es la mejor prevención de riesgos. Haber evaluado previamente todas las aristas de la operación, facilitará conseguir el préstamo hipotecario más adecuado y, por supuesto, aprovechar mejor la inversión.
Además, estamos ante un momento óptimo para la solicitud de hipotecas. Esto se debe a que los tipos de interés están en mínimos históricos. Y no solo eso, sino que, además, la vivienda es un seguro contra la inflación, que actualmente está disparada (en diciembre alcanzó el 6,7 %). En este artículo te explicamos por qué el inmobiliario otorga esta seguridad.
A estos alicientes hay que sumar el buen momento que vive el mercado inmobiliario y las previsiones para la rentabilidad del alquiler en 2022. Así que, si estás pensando en hacer una inversión inmobiliaria y solicitar una hipoteca para ello, no te lo pienses más porque es tu momento.